Las fallas de Xàtiva son declaradas fiesta de interés turístico autonómico

Ha primado el hecho de ser la primera ciudad después de Valencia en plantar monumentos y de tener actos que son únicos en la fiesta.

La Conselleria de Turismo ha otorgado a las fallas de Xàtiva la declaración de fiesta de interés turístico autonómico después de que el Ayuntamiento de la ciudad solicitase esta declaración a instancias de la Junta Local Fallera.

 

Esto supone un nuevo impulso turístico para Xàtiva y el reconocimiento a una fiesta, «que año tras año va perdurando y atrae a un montón de gente de toda la Comunitat», manifestó el presidente de la Junta Local, Javier García Paños.

 

Para llevar a cabo la petición del reconocimiento autonómico, la Junta Local preparó un extenso dossier donde se ponía de manifiesto las características de las fallas de Xàtiva, que fue la primera ciudad después de Valencia que plantó un monumentos en la calle, concretamente en 1865 en la Plaza de la Trinitat que llevaba por lema ‘La peixca de l’aladroc’.

 

También destaca el hecho de que fue la primera ciudad en editar libros de fallas, concretamente los editados por el impresor Blai Bellver para la falla de la Plaza de la Trinitat. El más conocido fue el editado bajo el nombre de ‘La creu del matrimoni’, en 1866, que mereció una rotunda condena por parte del arzobispado.

 

El libro sufrió la censura eclesiástica y a instancias del arzobispado de Valencia y el Capitán General de la zona se prohibió que se plantase el monumento en la plaza y el libro fue retirado de la circulación. La Junta Local lo reeditó hace dos años.

 

Otro aspecto que ha primado en esta declaración es que las fallas de Xàtiva tienen un acto único que no se celebra en ninguna otra población, como es la romería que se lleva a cabo el 19 de marzo desde la Ermita de Sant Josep hasta la albereda, después de la celebración de una misa, «en esta romería participa el gremio de carpinteros que se encargan de llevar la imagen, y este acto viene celebrándose desde hace más de 70 años», manifestó García Paños.

 

Siguiendo con la documentación aportada, la Junta Local hizo llegar el hecho de que la primera fallera mayor fue elegida en el año 1933, en la falla que se plantaba en la Plaza de Sant Jaume, llamada entonces Mártires de la Revolución. Un año más tarde fue elegida Lola Sanz y en el año 1936 Hermina Moltó, que aún vive y que participó en los actos que la Junta Local organizó en el año 2007 con motivo del 75 aniversario de la creación de esta organismo.

 

Precisamente esta celebración sirvió para plantar por primera vez dos fallas municipales, hecho que se repitió en el 2008, pero que ya no tuvo continuidad el pasado año y tampoco lo tendrá este.

El siguiente paso después de la declaración de fiesta de interés turístico autonómico será crear un museo fallero donde se pueda contemplar todo lo que se ha ido guardando estos años», dijo García.

En estos momentos se plantan en Xàtiva 18 monumentos y hay censados unos 3.600 falleros.